martes, 11 de marzo de 2014

Parc del Laberint d'Horta

El pasado domingo, un numeroso grupo de Cazadores de Hermes realizamos una visita al Parc del Laberint d'Horta. Tanto los domingos como los miércoles, la entrada al parque es gratuita y su hora de apertura es a las 10h. Ver horarios y precios.
Tras bajarme en la estación de metro de Mundet, me dirigí a la entrada junto a Jordi y Andrés. Para acceder al parque basta con rodear el velódromo y subir unas escaleras y enseguida te encuentras frente al Palau Desvalls, también conocido como Palau del Marqués de Alfarrás.

Esta mansión, construida por la familia Desvalls, data del siglo XVIII y, aunque su estilo es neogótico, tiene varios añadidos mozárabes. En su parte posterior tiene adosada una antigua torre medieval de defensa del siglo VIII llamada Torre Subirana.


Únicamente está en uso una parte de la casa. Desde 1993 se encuentra ahí el Centro de Formación del Laberinto, instituto municipal para la formación en jardinería, con biblioteca incluida.

Por desgracia el resto requeriría una gran inversión en su restauración.


La entrada al parque queda a mano izquierda, y en cuanto llegó el resto de "Cazadores de Hermes" accedimos al recinto.

Este parque es el jardín histórico más antiguo que se conserva en Barcelona. Se divide en dos zonas: un jardín neoclásico del siglo XVIII, y un jardín romántico del XIX. Las obras se iniciaron en 1794 cuando Joan Antoni Desvalls, sexto marqués de Llupià y marqués consorte de Alfarrás y con la ayuda del arquitecto italiano Domenico Bagutti, diseñaron un jardín neoclásico.


Avanzamos dejando a nuestra derecha el palacio.


Y lo primero que encontramos fue una fuente heráldica profusamente ornamentada y recubierta de vegetación. La enorme columna está coronada por la figura de un perro alado. En su base se sitúa lo que parece ser un cisne.


La realización del parque corrió a cargo de Jaume y Andreu Valls y del jardinero francés Joseph Delvalet.
Seguimos avanzando y a nuestra izquierda vimos la Puerta China que daba acceso al jardín oriental.


Sin embargo, nosotros seguimos el camino manteniendo siempre el palacio a nuestra derecha.

Hasta que encontramos la entrada (cerrada) al jardín doméstico de 1880 y el jardín de los Bojes.

Atravesamos la plaza de los leones manteniendo el jardín de los Bojes a nuestra derecha. El parque está plagado de piezas escultóricas, algunas con motivos mitológicos y otras con motivos rústicos, así como un gran número de fuentes, surtidores y balsas.




Seguidamente enfilamos el camino que dejaba el jardín de las flores a nuestra derecha hasta llegar a una plaza con columna.


Desde ahí ya era visible el laberinto que da nombre al parque. La entrada se sitúa en el otro extremo. El laberinto cuenta con 750 metros de cipreses recortados y en su entrada contemplamos un relieve en mármol de Ariadna y Teseo con el verso: "Entra, saldrás sin rodeo, / el laberinto es sencillo, / no es menester el ovillo / que dio Ariadna a Teseo".




Aunque sencillo, si no usábamos el hilo de Ariadna, como mínimo disponíamos de la ayuda de un plano de los 225 metros cuadrados de laberinto.

1. Entrada. 2. Centro. 3. Salida.

Tras algunas indecisiones, conseguimos llegar a su centro donde nos recibió la estatua de Eros.


Tras un breve reposo salimos del laberinto encontrándonos ante un estanque a la salida.


 Frente a él, la Gruta de Eco y Narciso con la inscripción: "De un ardiente frenesí / Eco y Narciso abrazados, / fallecen enamorados, / ella de él y él de sí".


Sobre el laberinto se alza el Mirador o Belvedere con dos templetes con estatuas de Dánae y Artemisa y columnas toscanas. Junto a éstos se encuentran dos fuentes decoradas con relieves y bustos.



Desde la escalinata y mientras cruzamos el canal romántico el laberinto pierde su enigma al poder contemplar su diseño desde una perspectiva aérea.







En el tercer nivel encontramos el Pabellón de estilo neoclásico de Carlos IV. Está coronado por una escultura que representa a Apolo y las musas.


Detrás del pabellón se encuentra un gran estanque nutrido por la fuente de la ninfa Egeria, inspirado en la gruta de Stowe.




El jardín romántico data de mediados del siglo XIX gracias a que los descendientes del marqués ampliaron el parque, bajo la dirección del arquitecto Elies Rogent, con parterres, plazas, grandes árboles y una cascada.








En 1967, la familia Desvalls cedió el parque al Ayuntamiento de Barcelona, que lo abrió al público en 1971, tras una restauración efectuada por Joaquim Casamor.







El Parc del Laberint d'Horta ha sido escenario de recepción de reyes, de veladas sociales y culturales, de representaciones teatrales al aire libre, e incluso de escenas de películas (El perfume), ahora es el momento de que tú lo disfrutes ya sea en pareja, en familia o con los amigos.

Ver además: Parc del Laberint d'Horta de Instants Barna

13 comentarios:

  1. genial entrada y una fotos fantasticas! que dia mas fantastico cogimos.

    Abrazos!

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    1. http://instantsbarna.blogspot.com.es/2014/03/laberint-dhorta-para-no-perder-detalle.html

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    2. Gracias Jordi. Fíjate tu sí hizo buen día que acabé quemándome la cabeza.
      Ahora me miro tu entrada.
      Un abrazo

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  2. El parque es hermoso, pero tus fotos lo son todavía más. ¿De verdad vimos todo esto? ;-)

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    1. Gracias Albert. Pues sí, todo eso vimos. Y estoy seguro que nos perdimos muchas cosas más. Sí vuelvo otro día seguro que descubro otros rincones.
      Un abrazo

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  3. Sí que hizo un estupendo día de Sol, lo demuestra que ha mitad de camino tuvimos que parar para recuperar fuerzas de camin a la gran calçotada!! un abrazo

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    1. Como siempre que hemos quedado los Cazadores nos lo pasamos en grande y, a pesar de algún contratiempo, nosotros a lo nuestro y a pasárnoslo bien.
      Un abrazo

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  4. Con tus fotos me han venido unas ganas enormes de visitarlo! En 2005, la última vez que me operaron y estuve ingresada en Vall d'Hebron, mi familia fue un día a visitar el laberinto y me regalaron un libro precioso para que viera como era y para que lo visitara cuando saliera del hospital. De eso hace casi 10 años y aún no he ido...
    A ver si me animo un domingo de primavera, que estará precioso!
    Saludos!

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    1. Yo era la primera vez que iba y me encantó. Lo tengo relativamente cerca del trabajo por lo que no descarto hacer una escapada para relajarme un rato.
      Besos

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  5. ¡Unas fotos geniales! Me pasaré por allí algún fin de semana :) ¡Gracias!

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    1. Muchas gracias Irene. Un lugar no demasiado conocido pero que merece la pena acercarse para disfrutar de un agradable paseo.
      Besos

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  6. Hola Enrique,
    Me han gustado mucho tus fotos. Has dado una visión muy completa de todo lo que vimos y disfrutamos esa mañana, preludio de primavera.
    Un abrazo

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    1. Gracias Maite, fue un gran día. Lo pasé en grande en vuestra compañía.
      Besos

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