Ayer sábado disfruté de un magnífico día en familia. Como ya va siendo tradición disfrutamos de una excelente comida: una calçotada hecha con fuego de leña.
La salsa para los calçots la hizo mi tía y le quedó para chuparse los dedos. Como el resto de viandas. Habían tantos calçots que sobraron y al día siguiente nos los hicimos rebozados:
Habituado a la vida urbana, un día al aire libre mejora la salud y el humor. Por supuesto no me reprimí al hacer fotos de lo que a mí tanto me gusta:
Mmmmm.... ¡qué ricos los calçots con salsa de avellanas!!!! Acaba uno negro desde la coronilla hasta las manos. :-)
ResponderEliminarBesos
Ya lo creo Elvira ¿Y lo bien que te lo pasas ensuciándote? Es todo un montaje. Yo siempre me acabo la salsa el primero pues los mojo bien. Y están de muerte.
ResponderEliminarBesos
Yo no sólo no he ido nunca una calçotada sino que ni siquiera he probado un solo calçot. Pero ya me he propuesto que de la temporada que viene no pase. No sé si me gustarán, pero habrá que averiguarlo.
ResponderEliminarHmmm.....Bon profit!!!
ResponderEliminarNo sabía que se podían rebozar...
Besos
Hola Cristina, te recomiendo que los pruebes, es algo que suele gustar a la mayoría de gente. Incluso a aquellas personas a las que no les gusta la cebolla. Pero depende de donde los comas. Yo los he pedido en algunos restaurantes que te dan 4 pequeños y sin sabor y con una salsa insulsa, mientras que los que comí ayer estaban sabrosísimos. Yo ya debo llevar como unos 20 años o más haciendo calçotadas anualmente. Y ya espero con ganas la del próximo año.
ResponderEliminarHola Laura gracias, pues yo tampoco lo sabía hasta ahora y también así están muy buenos. Se pueden rebozar como quieras. Con harina como si fuera tempura, o con pan rallado. Últimamente también he probado el rebozado con los copos para hacer el puré de patatas.
Besos a las dos.
Me encantan los calçots! Y no digamos la salsa! Hace un montón de años que hacemos calçotadas con amigos y también con nuestros padres y como dices, es mucho mejor hacerlos en el campo que no en restuarante. Cada años hago varias calçotadas con diferentes amigos y algún año he quedado incluso empachada jeje! Lo de rebozarlo me lo comentó una amiga hace un par de semana, pero aún no lo he probado.
ResponderEliminarQue paz transmite el pastor alemán... esa foto es preciosa...
Pues sí Guacimara, antes íbamos a un restaurante donde, la verdad, los hacían bastante bien, pero cada vez nos cobraban más y nos daban menos calçots así que desde hace unos años nos los hacemos nosotros y a la vista están los resultados. Lo de rebozarlos vale también la pena probarlos, eso sí si es que sobran. ;)
ResponderEliminarBesos
Pues voy a continuar con mi faceta negativa ;) Mira que me gusta mucho la cebolla pero los calçots nada de nada y la salsa aún menos, normalmente las salsas no me gustan y no suelo comer ningún tipo de salsa. Por cierto, que tampoco he ido de calçotada en mi vida. Si voy a alguna pediré otra cosa XD
ResponderEliminarBesos
P.D. No te lo pude comentar pero me encanta el regalo que le hicistéis a vuestra amiga. Estuve curioseando muuucho rato por la web.
Bueno, tampoco le ha de gustar todo a todo el mundo. La única duda que me queda es si los has probado o no? Mi hermana estuvo muchos años diciendo que no le gustaban...hasta el día que los probó y le gustaron. También era reacia a las salsas, pero también le gusta.
ResponderEliminarSí, no pude preguntarle si le había gustado pues tuve que marchar a lo de la calçotada, pero me ha dicho que sí. Creo que es un regalo muy original.
Besos
Oh Enrique!! Qué envidia me has dado, con lo me gustan a mi!!
ResponderEliminarPero siempre que los he probado en restaurantes son malísimos! Mucho mejor los de casa!!
El año que viene me apunto!!
Guaaauu que buena pinta!! Así en en el campo seguro que saben mucho más ricos que en un restaurante ;) Además vaya buen día que os hizo!
ResponderEliminarbesitos
Hola Marta, si se pudiera colgaría directamente los calçots en Internet para que pudiérais probarlos. Por desgracia la tecnología no da para tanto ;)
ResponderEliminarHola Isina, pues sí nos hizo un día espectacular. Una gozada estar al aire libre mientras se cocinaban los calçots y te iba llegando el aroma.
Y por supuesto que si a mi tía no le importa estais tod@s invitad@s.
Besos
Hola Quique, estamos muy contentos del exitazo que han tenido los calçots, lástima que no podemos invitar a tanta gente porque el espacio no da para más. Es cierto que tu tía es una crack.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ale y Pere
P.D.: los calçots fueron recogidos por el "pagès" la misma mañana que se comieron.
Hola familia. Qué ilusión nos ha hecho veros por aquí. Ya veis el éxito que han tenido los calçots. Incluso al día siguiente estaban buenísimos. Conservaban ese sabor a fuego de leña. Y ahora que ya sabeis donde encontrarnos (virtualmente hablando) esperamos que nos visiteis en otras ocasiones.
ResponderEliminarBesos también de parte de Ángeles
Recuerdo hace un par de años cuando estuve en Lleida que probe los caracoles típicos de allí, cocinados en una plancha al horno, y me encantaron. Me quedé con las ganas de comer esto y de ponerme las manos negras, así que en cuanto planee otra visita por tierras catalanas, esto será parte de la visita obligada.
ResponderEliminarUn abrazo!!
Hola Mil Violetas. Pues si quieres probarlos tendrás que escoger la época de los calçots que ya ves que es entre febrero y marzo. Pero vale la pena probarlos en algún sitio que los hagan bien.
ResponderEliminarBesos