Centrándonos en nuestro tercer día de estancia en la capital sueca, fuimos a ver el ayuntamiento, el "stadshuset". Llegamos muy pronto, aún sabiendo que la primera visita guiada en español era a las diez, pero, como somos muy precavidos, preferimos esperar 40 minutos a que luego todo se nos atrase. Aprovechamos también para sacar la entrada de la torre, sabiendo que la visita al ayuntamiento duraría unos 45 minutos la cogimos para las 11:15 h.
Otro tópico más sobre los suecos es que son muy organizados. Sin embargo, pudimos comprobar que tampoco en este sentido son perfectos. No entiendo porqué tienen programada para las 10 h seis visitas guiadas en otros tantos idiomas y todas empiezan a la vez. Yo oía más al de inglés que a la chica de español. Menos mal que era el de inglés y no el de ruso el que nos seguía. La visita al ayuntamiento es otra de esas visitas casi obligadas. Durante el recorrido te explican muchas anécdotas, por ejemplo, que la sala en la que tiene lugar el banquete de la entrega de los Nobel se llama la Sala Azul, pero no tiene nada de azul dado que al arquitecto le gustó como quedó con el ladrillo vista. Que imita a una plaza italiana del norte, pero que no la pudieron dejar abierta (por razones climáticas obvias), aunque el techo tiene en sus laterales unas entradas de luz para que parezca una plaza abierta, y por la noche proyectan un cielo estrellado. Que todos los materiales con los que se hizo provienen de Suecia. Que la escalera tiene los escalones a la distancia y medida justa para que las mujeres con traje de noche puedan descender sin problemas. Que en el banquete de los Nobel está tan lleno que la gente apenas tiene sitio para comer.
Luego se sube por la escalera para visitar otras salas, pero en ellas la interferencia de idiomas me impidió quedarme con tantos detalles. La última que se visita, la sala dorada, donde tiene lugar el baile de los Nobel, es también muy curiosa. Está decorada con 10 millones de pedazos de pan de oro. Pero volvemos a ver, en este espacio, que los suecos son humanos pues existen varios errores de diseño. En uno de los lados los personajes que tocan el techo tienen la cabeza cortada debido a un error de cálculo al no tener en cuenta que el mosaico iba a empezar por encima de los bancos. El artista, Einar Forsteh, se disculpó diciendo que de todos modos aquel fue el destino del descabezado.
En el otro lado una enorme mujer destaca en la sala, es la reina del lago Mälaren. Su aspecto no agradó a la gente, pero el arquitecto, Ragnar Östberg, no quiso que la quitaran. Una vez más el artista tuvo que dar explicaciones. Su aspecto era ese ya que debía mediar entre oriente y occidente, de allí todo el simbolismo del que se impregnaba, incluidas las serpientes que parecía tener en la cabeza o esos enormes ojos que todo lo vigilaban, por no hablar de los gigantescos pies y manos.
Otras salas de interés son la del concejo del ayuntamiento, con su techo en forma de barco invertido, y la galería del príncipe Eugenio, donde pintó la ciudad él mismo en un fresco para que los que estuvieran en esa orientación vieran lo mismo que los que miraban hacia las ventanas (creo que salieron ganando éstos últimos). Podéis ver algunas fotos más en: Fotos del stadshuset.
Al acabar la visita guiada fuimos hacia la entrada de la torre. Mientras esperábamos nos recreamos con las magníficas vistas de y desde los jardines. Pero pronto nos pusimos a la cola, para ser de los primeros en coger el ascensor que sube hasta el primer nivel, donde se encuentra el museo de la torre, para luego completar el ascenso a través de rampas y escalones. Las vistas desde lo alto son espectaculares, sobre todo la visión que se tiene de Gamla Stan.
Un sitio muy agradable al que volvimos en otra ocasión. La placita no pudimos fotografiarla bien de lo que llovía, pero la veréis en otras entradas, sobre todo cuando fuimos de noche. Ver más fotos de Gamla Stan.
Finalmente acabamos en el Palacio Real, entramos porque con la Stockholm Card no teníamos que pagar y porque solo quedaba una hora para que cerraran, pero tampoco es que los palacios nos atraigan mucho. Por ese motivo no lo vimos entero, por ejemplo, no vimos el tesoro, pero ya tuvimos suficiente dorado. Ver más fotos del Palacio Real.
Al salir el día ya estaba mejorando, pero teníamos la Catedral demasiado cerca por lo que volvimos a meternos bajo techo. La Storkyrkan de estilo gótico tardío contiene en su interior numerosas piezas de arte de diferentes épocas, de las que destacan la enorme escultura de San Jorge y el Dragón.
Aunque a mí particularmente me llamó la atención un cuadro a la salida, se trata de la representación de un fenómeno luminoso que acaeció sobre la ciudad de Estocolmo el 20 de abril de 1535. En el cielo aparecieron seis cercos luminosos con crepitantes imágenes del sol. El cuadro que se exhibe, denominado Parhelio, no es el original, si no una copia de 1630. Ver más fotos de la Catedral.
Tras salir de Storkyrkan poco más podíamos hacer. Paseamos un rato y como había sido un día tan completo y agotador por culpa de la lluvia, nos dirigimos hacia el hotel, pero antes, y como ocurría en el cuadro de la Catedral, pudimos ver algún que otro fenómeno luminoso.
Sol convertido en luna. Día en noche. |
Continuará...
Recuerdo perfectamente la enorme sala del Ayuntamiento y los mosaicos dorados, pero no subimos a la torre porque hacía un día horrible y llovía. La Catedral también me gustó muchísimo por dentro, con la bola de velas y el barco (me fascinan las iglesias con barcos).
ResponderEliminarSigue poniendo los álbunes de flickr que por lo menos yo me los veo todos!
Besos.
Hola Guacimara. A nosotros nos vino de poco, pues a nada de bajar de la torre se puso a llover, y no sé si dejan subir si está lloviendo. Nosotros siempre que visitamos cualquier ciudad buscamos sitios desde los que se pueda ver desde las alturas. En Estocolmo habían más sitios, pero finalmente solo subimos a éste. En cuanto al barco, al que le hice una foto pero quedó a contraluz y no se veía muy bien, me recordó a Santa Mª del Mar.
ResponderEliminarMe alegro que me digas lo del Flickr, pues pensamos que era la manera de poner más fotos y verlas más cómodamente, pero por otro lado da más trabajo así que si como mínimo las ves tu ya ha valido la pena.
Besos
Yo tengo una buenísima amiga sueca y es organizadíiiisima, una pasada.
ResponderEliminarLa 4ª foto me ha dejado embelesada...
Besos
Hola Elvira, sí, por eso nos extrañó ver que hubieran puesto para la misma hora a 6 idiomas y los hicieran pasar a todos a la vez. Alguna explicación debe tener. Como por ejemplo que así no están constantemente los turistas deambulando por las salas.
ResponderEliminarSupongo que te refieres a la de Gamla Stan desde la torre. Realmente las vistas eran muy buenas. Valió la pena subir.
Besos