No acababa de entender el sentido del graffity, por lo que al volver a Barcelona lo busqué en internet y me enteré que éste había sido repintado por otro grafitero (Robbo o algún seguidor del mismo) que a su vez había visto como Banksy superponía una de sus pinturas a un graffity que había realizado hacía muchos años y que formaba parte del paisaje urbano.
De nuevo Robbo volvió a repintar su propio graffity pero respetando el de Banksy.
Esta aparente guerra entre graffiteros podría parecer otra forma de darse publicidad, aunque me extraña que Banksy la necesite, pues sus acciones han traspasado fronteras.Ahora, Banksy ha dado un paso más con su película-documental.
Exit through the gift shop se ha catalogado como falso documental debido
a que se vale de este género cinematográfico para explicar una historia que nunca sabes hasta donde es cierta y hasta donde inventada. Además, utiliza un metarecurso: explicar cómo se realizó el documental dentro del propio documental. Sin embargo, lo que más sorprende es que la película no va sobre Banksy, como él mismo dice al principio, si no sobre Thierry Guetta, todo un personaje que fluye desde la obsesión al éxito. Finalmente la historia da un nuevo giro para llegar a hacer una crítica sobre la mercantilización del arte. La película tiene buenos momentos, y otros más flojos. Destila ironía sin llegar a ser hilarante.Después de todo lo dicho, a uno le asaltan muchas dudas. ¿Qué es arte? ¿Qué es negocio? ¿Qué es vandalismo? ¿Quién es Thierry Guetta? ¿Quién es Banksy? ¿Qué hay de cierto o falso en la película?...Pero hay algo que tengo claro: Me gusta la obra de Banksy.
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