En esta ocasión el recorrido por Barcelona será más largo que en posts anteriores, y me temo que ocurrirá lo mismo en otros casos pues, a veces, el tema a tratar nos lleva por toda la ciudad. Pero gracias a Internet también tenéis la opción de hacer el trayecto desde vuestra casa. En el paseo que haremos juntos vamos a desvelar el significado de varios detalles que encontramos sobre las fachadas de algunos edificios, empezando por el más enigmático de todos ellos: la mano de la Barceloneta.
La pieza se encuentra en la esquina de las calles Soria y St. Carles en un edificio de 1875. Se desconoce el significado de esta mano izquierda, pero a ambos lados se ven unos triángulos que podrían indicar el sentido de las calles. Aunque la mano no deja de ser un misterio.
De la Barceloneta nos vamos al Borne, en la calle Mirallers, cerca de Santa Mª del Mar, y también haciendo esquina descubrimos una cara de mujer: ¿Qué representa?
Este rostro, llamado “la carassa” y que da nombre a una calle cercana, se mimetiza perfectamente con la piedra de la fachada. La escultura tenía como función indicar la localización de un burdel. Una figura de piedra era el logotipo perfecto para extranjeros o analfabetos que buscaban placer.
Podemos ir andando hasta nuestro próximo destino: el buzón de la Casa de l’Ardiaca junto a la Catedral. Además del escudo de la ciudad aparecen tres elementos más: unas golondrinas, una tortuga y hojas de hiedra. ¿Qué significado tienen?
En 1895 la casa se convierte en la sede del Colegio de Abogados. En 1902 se encarga la decoración a Lluís Domènech i Montaner. Las golondrinas representan la velocidad con la que los abogados querrían que fueran sus pleitos, las hojas de hiedra los contratiempos, y la tortuga la lentitud, aunque la versión popular hace referencia a la velocidad con la que debería ir correos pero la lentitud que finalmente muestra. En 1921 el Ayuntamiento que había comprado la casa previamente, la destina al Archivo Histórico de la Ciudad. En 1970 el buzón es restaurado pudiéndose ver todavía en el escudo la espada y las balanzas de la justicia.
De aquí nos dirigimos al Ensanche. En el Paseo Sant Joan 108 encontramos una escultura a la izquierda de la puerta de la Casa Macaya.
El escultor Eusebi Arnau hace aquí un homenaje al medio de transporte más cómodo y veloz de la época: la bicicleta. La Casa Macaya, construida en 1901 es obra de Josep Puig i Cadafalch y cuenta con refinadísimos detalles en piedra.
Subimos hasta la Diagonal y nos dirigimos hacia el edificio del Círculo Ecuestre en la esquina con Balmes. Sobre su fachada observaremos una placa:
Como puede leerse se trata de la placa de un premio del Ayuntamiento de Barcelona que concedía a edificios en reconocimiento a su valor arquitectónico y decorativo. En este caso, la Casa Pérez Samanillo, del arquitecto Joan Josep Hervás i Arizmendi, gano el 1er premio en 1911, pero obviamente podemos encontrar muchas más de estas placas por la ciudad. Las placas fueron diseñadas por Bonaventura Bassegoda y modeladas por el escultor Andreu Aleu Teixidor.
Seguimos ascendiendo hasta llegar a la Rambla del Prat 16. Efectivamente, se trata del cine Bosque. Sobre su fachada encontramos cuatro caras, ¿quienes son?
Los rostros de piedra representan a Pablo Gargallo, Pablo Picasso, Isidre Nonell y Jacint Reventós. El autor de las imágenes: Pablo Gargallo, recibió el encargo para decorar el teatro que ocupaba el lugar que con anterioridad había ocupado un bosque propiedad de Joaquim de Prat i de Roca, y donde se realizaban representaciones teatrales al aire libre. Las caras, mal consideradas como capiteles, se han conservado en las diferentes remodelaciones del teatre del Bosc y del cine Bosque aunque cambiándolas de orden.
Acabaremos nuestro recorrido dirigiéndonos hasta la calle Montnegre 46, cerca de Entenza. Para trasladarnos allí será necesario tomar algún medio de transporte. Allí podemos ver la cabeza de un macho cabrío. ¿Por qué está allí?
Existía una familia de granjeros que criaban corderos en las cercanías del barrio y que se dedicaban a la comercialización de la carne y despojos de estos animales. Eran conocidos como los “tripaires”. En los bajos del edificio había también una carnicería pero no se puede asegurar que fuera propiedad de la familia mencionada. En cualquier caso, el elemento recuerda la vida rural dentro de la ciudad.
Debo mencionar finalmente que para esta entrada y para otras que están por llegar he obtenido mucha información de un inventario del mobiliario urbano realizado por la UB.
Recuerdo perfectamente haber visto ese buzón con los pájaros y la tortuguita. Es muy bonito.
ResponderEliminarLo que me ha llamado la atención es lo de la cabeza de mujer para que los turistas no se perdieran ;)
Me da la sensación de no conocer mi ciudad. ¡Gracias de nuevo por el paseo! Muy ilustrativo y curioso todo lo que cuentas.
ResponderEliminarUn beso
Me encantan estos pasaos curiosos por Barcelona, en cuanto tengamos tiempo haremos alguno :)
ResponderEliminarGuacimara: Aunque yo soy de Barcelona no te creas que conocía mucho más que el buzón (solo las caras del cine Bosque).
ResponderEliminarElvira: Gracias a vosotras por leerlo. Lo dicho, no te creas que yo conozco mi ciudad, estoy en proceso de conocerla.
Isina: Para hacer estos paseos hay que fijarse en las distancias a recorrer. Algunos se pueden hacer perfectamente andando y otros requieren largos desplazamientos. Pronto pondré los planos y localizaciones de todos estos sitios. Tengo que pensarme cómo lo haré.
Gracias una vez más por vuestro seguimiento. Yo estoy muy animado a seguir la verdad es que me lo paso muy bien y aprendo mucho.
Besos
¡Gracias por estas entradas, Enrique! La de veces que he visto ese buzón y me he preguntado por su significado :)
ResponderEliminarHola Carolina, Bienvenida al blog!!! Gracias a ti por tu comentario, espero que sigas visitándonos pues habrán muchas más entradas de éstas.
ResponderEliminarBesos
Me repito: me encantan estas entradas. Todo me ha parecido curiosísimo, pero me quedo sobre todo con el misterio de la mano.
ResponderEliminarSí a mi también me sorprende mucho que existan elementos en nuestra ciudad de los que no se sepa su origen. Quizás alguien lo sepa, pero yo no he encontrado una expliacción a ese enigma. Gracias una vez más, yo tampoco me cansaré de agradeceros vuestros comentarios.
ResponderEliminarBesos
He estado toda la semana con gripe y no me he conectado a internet así que hoy he aprovechado para ponerme al día de todas las entradas que no había podido leer. Me han gustado todas!!!!!
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias Marta, espero que ya estés totalmente recuperada. Ángeles también lleva una semana renqueante.
ResponderEliminarBesos
Enrique! buscaba fotos de la Casa Macaya y te encuentro! Tengo fotos de casi todo por publicar menos lo del cine Bosque que no sabía!...tendré que pasarme! aix que agobio el tiempo y la de cosas que queremos hacer!
ResponderEliminarHola Neus. A mí me pasa a veces lo mismo. Busco cosas que acabo encontrando en blogs de los que ya conozco. Con lo grande que es Internet. Al final diremos también eso de que Internet es un pañuelo.
EliminarBesos
El buzón de la Casa de l’Ardiaca junto a la Catedral, hace referencia a la velocidad de las noticias. Las malas llegan volando como las golondrinas y las buenas llegan poco a poco como la tortuga
ResponderEliminarGracias por esta nueva interpretación. Lo cierto es que hay varias opciones y que cada cual escoja la que más le guste.
EliminarUn saludo
Felicidades! excelente trabajo!!!
ResponderEliminarMuchas gracias y un saludo
EliminarDespués de 30 años, me voy a reencontrar con mi profesor de história justo aquí, delante de este buzón. Fue el (Manuel Medarde) quien nos explicó el significado de esta alegoria y... fue cuando lo encontré a través del facebook cuando le comenté que aún recordaba esta alegoria que nos explicó. Pues bien, el reencuentro después de unos 30 años, el lugar escogido es precisamente la casa de l'Ardiaca (junto al buzón).
ResponderEliminarUn saludo y gracias por el reportaje.
Gracias a ti Felipe por tu comentario. Muy interesante la historia que cuentas. Hay lugares concretos que acaban siendo especiales con el paso del tiempo.
EliminarUn saludo