Reciben este nombre aquellos astronautas fallecidos en acto de servicio y que por cuestiones políticas han sido eliminados de la historia. Uno de los casos más conocidos es el del cosmonauta Iván Istonchnikov, cuyo espeluznante relato apareció incluso en el programa Cuarto milenio. Ahora es posible conocer toda la verdad gracias a la exposición: Sputnik: la odisea del Soyuz 2 en CosmoCaixa.
Conozcamos la exposición de manos de uno de sus comisarios: Joan Fontcuberta.
En 1968 nos encontramos en plena confrontación entre EEUU y la Unión Soviética por el dominio del espacio, la conocida carrera espacial para ver quien llega a la Luna en primer lugar. Ese año los soviéticos emprenden una misión que para la opinión pública sea considerada una proeza. Dado que la misión anterior acabó con un estrepitoso fracaso, querían resarcirse de esa mala imagen e idearon un acoplamiento en el espacio entre la Soyuz 2 y 3. Tras unos problemas iniciales consiguen acoplar las naves, pero entonces descubren que la Soyuz 2 está vacía. Ni rastro de Istochnikov ni de la perra Kloka que viajaba con él.
Las autoridades soviéticas para evitar un nuevo fiasco inventan la historia de que Istochnikov no había existido nunca y que la Soyuz 2 volaba de forma automática. Para poder sostener esta interpretación es necesario borrar todo rastro del cosmonauta: su familia es enviada a Siberia, sus amigos son amenazados y retocan todas las fotografías en las que aparecía. Sin embargo, tras la glásnot, todo sale a la luz. En 1993 una casa de subastas pone a la venta una serie de objetos que habían pertenecido a cosmonautas soviéticos. A esa sesión acude el periodista Michael Arena, especializado en el tema, que consigue adquirir un lote en el que aparece una fotografía que le llama poderosamente la atención.
Se trata de una instantánea en la que varios cosmonautas posan y se acompaña de las firmas de los mismos. Los reconoce a todos menos a uno. Entonces recuerda haber visto antes esa imagen y la busca entre sus libros hasta que la encuentra. En ella Iván Istochnikov había sido borrado. A raíz de este descubrimiento, Arena investiga el caso encontrando mucho material y documentos, recuperando así la biografía del cosmonauta soviético.
Este material podemos verlo en la actual exposición: vitrinas con múltiples objetos y documentos:
La comida de los cosmonautas y píldoras anticonceptivas. |
Múltiples fotografías y dibujos:
Material científico:
Incluso los trajes que utilizaban los cosmonautas:
Pero la perla de la exposición se encuentra en un espacio protegido en el que se advierte antes de entrar que se trata de material radioactivo:
Un pedazo de meteorito como posible causa de la desaparición de la tripulación del Soyuz 2.
Meteorito de Kriptonita radioactiva |
En el siguiente reportaje podemos ver a Joan Fontcuberta en un documental de la 2.
¿Pero es éste el final de la historia? Si quieres conocer toda la verdad deberás acudir al CosmoCaixa antes del 31 de mayo. Para ello te invitamos a ver la exposición si cumplimentas el cupón que encontrarás en esta dirección. Y mi recomendación es que no pierdas detalle, observando todo con una mirada crítica para descubrir la verdadera historia de Iván Istochnikov.
Ver además:
Agenda de actividades de CosmoCaixa.
La Odisea del Soyuz 2 en CosmoCaixa.
No me lo perderé
ResponderEliminargracias
salut
Si vas a verla hazlo con ojo crítico y sin perder detalle. Lee la letra pequeña.
EliminarSalut
Te vas a reir, pero me ha llegado un comentario de una instagramer rusa que me ha comentado el tema del ¡error tipográfico en la palabra Soyuz!, tal y como nos comentaron. ¡Divertidísimo!
ResponderEliminarQué bueno, ya te digo que esta exposición da para mucho y no deja indiferente al nadie.
EliminarBesos