Paseos Curiosos por Barcelona (26ª parte)

Retomando las entradas relacionadas con los panots de Barcelona, seguiremos descubriendo curiosidades del suelo que pisamos.
En ocasiones, por ejemplo, no somos conscientes de que caminamos sobre lo que prácticamente es un museo de ciencias naturales:

 

Algunos de nuestros pavimentos están salpicados por diferentes fósiles.
Pero al caminar despistados no solo hace que nos perdamos esas maravillas naturales, si no que en ocasiones podemos llegar a meter la pata:

El cemento fresco es un caramelo para los que quieren dejar huella de su paso por la ciudad:

Y como ocurre en la avenida de la fama de Hollywood, aquí también podemos encontrar imprentas digitales en el suelo, aunque no con el mismo sentido.

Concretamente éstas se encuentran en la Plaça del Setge de 1714 en Poble Sec.

Pero ¿por qué otra entrada sobre panots? En anteriores posts puse varias fotos en las que mostraba la variedad de diseños que podíamos encontrar en pequeñas áreas. Aquí muestro nuevas capturas:

Una de aquellas fotos fue vista por los diseñadores de las cartas del Bar Velódromo que me pidieron incluirla. La carta en la que aparece la foto es la número 60 en verde y es un homenaje a los panots de Barcelona y se publicó en octubre de 2015. Las cartas del Velódromo se imprimen para que puedas llevártelas a casa y, si quieres, las colecciones.

Lo que seguramente desconozcan es que esa foto fue tomada en la calle Londres con Muntaner, a escasos metros del Bar.

Entre tanto la Avenida Diagonal ha sido reformada y el pavimento ha sido renovado:

Las nuevas baldosas, diseñadas por Terradas Arquitectos y producidas por Escofet, representan en bajo relieve las hojas del plátano y tienen una superficie rugosa que las hace antideslizantes. El diseño es tal que, para completarse el dibujo, deben colocarse los panots de la forma adecuada:

Lo que no siempre ha ocurrido: El difícil puzzle de las baldosas. Además al cabo de un tiempo empezaron a detectarse baldosas defectuosas: Las baldosas de la Diagonal no aguantan ni seis meses. Los nuevos panots de la Diagonal, que querían emular los del Paseo de Gracia, han resultado por tanto foco de polémica. Imagino que dentro de un tiempo, cuando todos nos hayamos acostumbrado, pasarán más desapercibidos.
Tan desapercibidos como extraños son los siguientes panots:

Solo ocupan unas pocas filas pegadas a la fachada en la calle Provença frente a un par de establecimientos.
No tan raros son los típicos panots de la rosa, los cuales son utilizados para casi todo, un diseño explotado hasta la saciedad:

No me extraña que lo usen incluso para completar los muros:

Este muro se encuentra en Horta y fue Andrés de Barcelona VeoDigital quien me avisó de su existencia.
También en anteriores posts comenté algunas curiosas disposiciones de las baldosas:

O los panots con la marca de la empresa constructora, como ésta de Órsola Solá y Cia.

O los panots con letras que forman el nombre de la calle:

Avenida Pearson

Calle Torre dels Pardals

Además de que la O está mal colocada, la C no tiene la cedilla, por lo que quizás es que falten la I y O de Comercio.

O los adoquines que cubren las calzadas:

Cambio de los adoquines en Horta

Adoquines en los laterales de la calzada en la Avenida Pearson

En entradas pasadas también hablé de los adoquines que rodeaban el Born Centre Cultural pero si observamos el pavimento que hay en los restos arqueológicos de su interior podremos descubrir una curiosa pieza destacada mediante un bastidor. ¿De qué se trata?

De una bomba de asedio, es decir, una bala de cañón.

Y finalmente las losas utilizadas en lugar de los panots:

Ciutat Vella

Poble Sec

Barceloneta

Tanto nos gustan las baldosas hidráulicas que cuando descubrimos la tienda Tottetris de Gracia no dudamos en entrar y adquirir un cuadro formado por diferentes diseños tanto de baldosas de interior como de exterior. Las losetas están fabricadas en madera y tienen un imán en el reverso que permite intercambiar las losetas.

Los panots son mucho más que una baldosa a la que pisotear; es historia, es arte, es tecnología y, para algunos, es incluso un juego: